jueves, 26 de enero de 2012

PRIMERAS PALABRAS.

Sobre la adquisición del lenguaje

Una situación recurrente con padres de niños recién diagnosticados es que piden que se les enseñe a hablar (profesionales, ¿les suena familiar?) dejando de por lado lo principal, ¡que el niño tenga las habilidades necesarias para adquirir lenguaje!

Para efectos de lenguaje, primero que nada es necesario que el niño tenga adquirida la habilidad e IMITAR, no solo cuando el niño quiere sino cuando se le solicite.

Cualquier terapia de lenguaje involucra a un profesional que muestra un modelo facial y/o sonoro (bucal) para que el niño la repita. Si el niño no repite dichos patrones, la terapia será en vano. Por lo mismo, aún y cuando sea un excelente terapeuta de lenguaje, si el niño no imita, difícilmente habrá un avance.

Asímismo, también debe existir una funcionalidad en el lenguaje adquirido. Enseñar a repetir palabras no es hablar. El lenguaje debe implicar una comunicación, la expresión de una idea o necesidad de algo, el intento para lograr algo (verbal behavior: conducta verbal).

Otra situación recurrente son los padres o hermanitos que "adivinan lo que el niño quiere". Si el niño satisface todas sus necesidades en formas alternas, ¿para qué aprender a hablar? El lenguaje debe no solamente ser adquirido por el niño sino también exigido por los padres.

En conclusión, para que un niño aprenda a hablar deben existir tres variantes muy importantes: que el niño tenga la habilidad de imitar, que el niño logre algo a través del lenguaje y que los padres exijan al niño dicho lenguaje (tal vez, este punto mas importante que los anteriores).

Como siempre les digo a mis terapeutas, a los niños hay que llevarlos caminando con pasos firmes, no con tropiezos por andar adelantándose.
(Fco. Javier Garza Fernández papá de Javiercito, autista severo)
http://www.autismo.com/e107_plugins/forum/forum_viewtopic.php?601
.




PROGRAMA PRIMERAS PALABRAS.




Este Programa no lo puedo traducir porque las palabras/sonidos/fonemas en alemán muy poco tienen que ver con las españolas. Así, una palabra que es muy sencillita de decir en alemán puede ser muy complicada en español, y viceversa.

Pero sí que puedo dejar la mecánica de trabajo, por si os puede ayudar.

Lo primero es hacer una lista de las palabras o sonidos que emite el niño. Cuando empezamos, Erik decía “agua”, “Loch” (agujero), Olive (oliva), Licht (luz), Keks (galleta) y Ball (pelota).
Y también una lista de sus objetos u actividades favoritas: tren, coche, cosquillas, pompas de jabón, bailar, etc.
De todo ello hicimos fotos (grandes y muy claras, sin cosas extras que pudieran desviar la atención). Y también fotos de las personas más cercanas (papá, mamá, abuelos, terapeutas).

Material de trabajo:
Objetos favoritos/Objetos conocidos  y fotos de los objetos/actividades favoritos.

En cada sesión de trabajo se trabajan como máximo tres palabras.
Algunas palabras se trabajan en la mesa, pero otras en movimiento. Es muy importante mantenere la motivación del niño, que sea todo muy divertido, con grandes muestras de alegría, con mucha interacción.
Hablar muy poco, con órdenes precisas y claras. Pronunciar la palabra que se vaya a trabajar de forma muy clara, vocalizando muy bien, y presentándola como la palabra más bonita del mundo (os puedo asegurar que en cuanto Erik se arrancó a ampliar vocabulario, sus palabras favoritas eran larguísimas: “Atemschutzgerät”, „Pfeffermühle”, etc., y yo me las veía fatal para pronunciarlas, ja,ja).

Es muy importante que el niño aprenda la palabra asociándola con una experiencia emocional (positiva o negativa). Es decir, no limitarnos a enseñarle la foto o el objeto cuya palabra tiene que aprender, sino incluirlo dentro de una interacción divertida.

Algunos ejemplos:

Pelota:
La T. tiene una pelota en la mano. La lanza al aire y la recoge, la hace rodar, juega con ella de forma muy divertida y dice: “pelota”. Se debe intentar por todos los medio que el niño se interese por la pelota, que alce las manitas para intentar cogerla, que corra detrás de la pelota cuando ésta ruede.
Al cabo de un rato, la T. sujeta la pelota entre sus manos y  da la orden: “(nombre del niño), di PE-LO-TA”. Probablemente, el niño no repetirá la palabra si no la conoce (por eso siempre es mejor empezar a trabajar con palabras que el niño conozca o pueda balbucear). Se le da la pelota (o se le lanza la pelota), se le deja al niño jugar con ella y se le dice: “bien, PE-LO-TA”. Otra vez lo mismo.
Llegará un momento en el que, si hemos desarrollado una interacción muy divertida y el niño tiene un deseo enorme de jugar con la pelota, la T. tiene la pelota, dice “(nombre del niño), die PE-LO-TA” y sólo se la lanzará si el niño repite la palabra. Ojo, nunca se debe frustrar al niño, si pasado un tiempo prudencial no ha dicho la palabra, pues se termina lanzándole la pelota y “bien, PE-LO-TA”.

Este tipo de juego se puede hacer con “coche” (se juega a rodar el coche, conducirlo por un circuito, etc.), “tren”, “pompas de jabón” o con otros juguetes favoritos.

Agua/zumo/chocolate/galleta, etc.
Con los alimentos, se trabaja en mesa.
Al niño le encanta el chocolate, por ejemplo. Se disponen trocitos de chocolate de distintas clases y en varios recipientes, todo muy divertido. Un trozo de chocolate está en un platito junto con un molinillo que da vueltas; otro trozo, junto al matasuegras; otro trozo, junto a las pompas de jabón, etc. Es decir, chocolate asociado a un objeto que al niño le guste mucho.
La T. toma un trozo de chocolate. Dice: CHO-CO-LA-TE, se lo come con muchos gestos de qué rico está. El niño querrá inmediatamente un trozo. Se da la orden: “(nombre del niño), di CHO-CO-LA-TE”. El niño no lo dirá al principio, pero se le da el chocolate y se dice de inmediato: “Bien, CHO-CO-LA-TE”. Mientras el niño se lo come, se usa como recompensa el juguete que estuviera junto al trozo de chocolate (por ej., pompas de jabón). Así se va haciendo un buen rato, utilizando cada vez uno de los juguetitos con recompensa.
Después, se da la orden: “(nombre del niño), di CHO-CO-LA-TE”. Se espera un tiempo prudencial a que el niño repita la palabra (y antes de que se frustre o empiece una rabieta, pues se le da el trozo de chocolate y la recompensa aunque no haya dicho la palabra).
Cuesta tiempo y paciencia, pero el nene dirá cho-co-la-te. O puede que empiece con “LA-TE”, pues ya está muy bien así, aunque la T. siempre corregirá: “bien, CHO-CO-LA-TE”.

Luz
Para provocar esta palabra, se usan linternas, juegos con lucecitas, etc.

Bailar/cosquillas/besar/abrazar
La mecánica es la misma que se ha descrito antes. Se crea una situación de juego, muy interactiva. Al principio se baila, o se hacen cosquillas al niño aunque no diga la palabra. Después hay que ir provocando que diga la palabra y esperando un tiempo prudencial para seguir bailando o haciendo cosquillas , etc. para provocar que la diga.
Con un columpio se puede hacer muy bien. Al niño se le sigue columpiando o meciendo más alto cada vez que dice: “columpiar” (o arriba, no sé, la palabra que se le quiera enseñar asociando).

Fotos de personas:
La T. muestra la foto de una persona y dice “PA-PÁ”. Después, la orden: “(nombre del niño), di PA-PÁ”. Conmo refuerzo se tienen sobre la mesa trocitos de las cosas de comer que más le gusten y sus juguetes favoritos.


Bueno, son algunas ideas que quizás pueden servir. Recomendaría empezar antes con el programa de “comprensión de lenguaje”, e ir luego trabajando los dos en paralelo.

¡Que lo paséis muy bien!








Del artículo de Raquel Ayuda Pascual “juegos de estimulación de la semántica y la sintaxis del lenguaje en niños con TEA”:

Adquisición de primeras palabras con valor referencial

Es importante observar al niño y determinar que palabras pueden ser más importantes en su desarrollo. Con frecuencia, los primeros términos que el niño emite hacen referencia a objetos de su interés y surgen con la función comunicativa de pedir el objeto que desean.

En este sentido, P. Howlin (2001) apunta también la importancia de que sea el niño el que nos indique lo que resulta más motivante para él, sea esto una acción (como “cosquillas”), un objeto (p. ejemplo, “pelota”), un alimento o el mero rechazo (como “vete”). Sin embargo, los alimentos y objetos implican un menor grado de abstracción que las acciones y, por ello, pueden resultar objetivos más elementales.

Por otro lado, Bondy y Frost (1994) proponen que en un inicio se pueden escoger palabras-objetivo que desaparezcan inmediatamente porque estimularemos que el niño utilice ese término con mayor frecuencia dentro de un mismo ensayo. Por ejemplo, si el niño utiliza la palabra “coche” con función de petición y le entregamos el coche, para volver a estimular el uso de la misma palabra tendríamos que quitarle el coche para que nos lo volviera a pedir o entregarle otro coche cada vez que utilizara la palabra y en este caso, la presencia de tantos objetos posiblemente distraería al niño. Por ello, resulta más útil juegos como las pompas de jabón, patatas fritas, etc. que desaparecen inmediatamente (dado que se rompen o se comen) y si el niño quiere más, surge una oportunidad inmediata y natural para utilizar de nuevo la palabra (pompas o patatas) que se pretende estimular.


Ampliación de vocabulario

Con frecuencia, el niño con TEA comienza a aumentar el vocabulario receptivo y expresivo siguiendo intereses un poco particulares. Sin embargo, se pueden aprovechar las situaciones de juego para estimular vocabulario, siempre partiendo de la base que los contextos naturales son los más apropiados para estimular la comprensión y uso de mayor vocabulario.

JUEGOS Y ACTIVIDADES

1.   Con ropa de disfraces se irán colocando prendas de vestir a la vez que se nombran. También se puede realizar el juego vistiendo a muñecos o recortables.

2.   Coger una maleta pequeña en la que se colocarán tiras de velcro, en las tiras se fijarán las fotos o dibujos de prendas de vestir que se irán nombrando mientras se prepara la maleta.

3.   Colocar una fila de dibujos que representen ropa, comidas, transportes, etc. Se  dispararán con flechas de ventosa y se nombrarán los objetos, animales, etc. en cuanto se acierte en ellos. En un nivel de mayor complejidad, se puede evocar el nombre de las acciones que se realizan con cada objeto seleccionado.

4.   Las primeras acciones que el niño aprende suelen relacionarse con las que él puede realizar. Resulta más adecuado estimular acciones como “correr”, “saltar”, “dame”, “pon”, etc. que acciones como “cocinar”, “cortar”, etc.

5.   La creación de una marioneta que pueda abrir la boca puede ser de gran utilidad en la adquisición de vocabulario; por ejemplo permite fingir que come metiéndole en la boca fotos o dibujos de alimentos.

6.   Con una cesta se irán introduciendo y sacando diferentes comidas de verdad, de juguete o representadas en fotos.

7.   Elaborar un cuento en el que se dibujará en cada página un personaje realizando diferentes acciones: por ejemplo, comer, jugar en el parque, jugar en la playa, vestirse, montando en diferentes transportes, etc.

8.   El juego del zoo: se esconden los animales de juguete por toda la habitación y se van buscando y se nombran una vez que se encuentran.

9.   Coger una cámara de fotos e ir soltando los dibujos de lugares como si salieran de la cámara de fotos. El niño nombrará los lugares.  

10.       El juego de los bolos: consiste en adherir dibujos a los bolos, colocarlos en fila e intentar derribarlos con una pelota, de forma que cuando se lance la pelota recogeremos los bolos que se han caído y nombraremos los dibujos que tienen pegados.

11.       Elaborar una diana que funcione con dardos de imán, sin punta. Pegaremos en la diana diferentes dibujos y los nombraremos cuando el niño o el adulto acierten en cada dibujo.

12.       Se pueden elaborar caretas, sombreros o uniformes prototípicos de diferentes profesiones. De forma que al colocar el sombrero se finjan escenas que habitualmente realiza cada profesional; el niño y adulto nombrarán la profesión. Por ejemplo, un sombrero de policía, de cocinera, de doctora, de panadero, etc.


PRIMERAS PALABRAS 2


Como continuación del primer programa “primeras palabras”, seguimos provocando el lenguaje de Erik con nuevas situaciones de juego e interacción. Lo más importante al principio era provocar que se divirtiera mucho. Después trabajar la palabra objetivo.

  1. Con el columpio logramos “más”, “alto”, “arriba”, “columpiar”
  2. Con la pelota logramos “pelota”, “pie”, “mano”, “tira”
  3. Haciendo cosquillas logramos: “más”, “cosquillas”, “basta”, “dedo”
  4. Con una pelota de gimnasia donde el niño se puede sentar y botar logramos “vuelta”, “hop-hop”, “redondo”
  5. Esperando a Erik con los brazos abiertos, cogiéndolo y levantándolo muy alto logramos: “arriba”, “alto”, “techo”, “brazos”
  6. Haciendo rodar un coche por una superficie (la mesa, por ejemplo) y rodándolo hasta que cayera al suelo logramos: “coche”, “abajo”, “run-run”, ·”roto”, “rueda”, “tubo de escape”
  7. Girando al ritmo de música logramos: “bailar”, “girar”
  8. Rodando por el suelo logramos: “rodar”, “suelo”, “barriga”, “culo”
  9. Con una cesta de ropa con la que nos disfrazábamos logramos palabras de distintas prendas y partes del cuerpo.

Y después pasamos a las canciones infantiles sencillas. La T. y Erik se sentaban frente a frente con dos sillas. La T. cantaba la canción (mejor muy cortita al principio) mientras daba palmas. Después la cantaba de nuevo, pero se detenía antes decir una palabra, esperando la reacción de Erik. Él se daba cuenta de que faltaba una palabra. Pasado un tiempo prudencial, se seguía con la canción. Después de repetir varias veces este juego, Erik empezó a decir la palabra que faltaba. Después se hacía lo mismo con dos palabras. Con el tiempo la T. y Erik cantaban juntos.

Lo mismo con juegos de dedos y pequeñas juegos infantiles. Con juegos de dedos, “este compro un huevo, este lo puso a asar, este le puso sal...., etc”. Y el mismo proceso que con las canciones.

O se sienta al niño en las rodillas y se dice lo de “al paso, al paso, al trote, al trote, al galope, al galope....”. Hay muchos de estos juegos.



CAPACITAR LA COMUNICACION EN NIÑOS PEQUEÑOS CON AUTISMO: 
 
Este folleto pretende ayudarle a encontrar formas nuevas de jugar con su hijo que promuevan el desarrollo de sus habilidades comunicativas. Incluye ideas para jugar y cantar, basadas en el trabajo de varios años de los profesionales en la Sutherland House School.

Antes de comenzar a presentar formas de ayudar a su niño a ser un mejor comunicador, puede que sea útil que comencemos reflexionando acerca de la comunicación y el lenguaje, y la manera en que se desarrollan normalmente en el niño.

En el desarrollo normal, el lenguaje oral comienza una vez que el niño es capaz de comunicar eficazmente de manera no verbal muchos de sus sentimientos, pensamientos e intenciones de manera no-verbal. Casi desde el nacimiento, los bebés producen una serie de ruidos, expresiones faciales y acciones, a las cuales los adultos, de una forma natural, reaccionan como si el bebé estuviese realmente hablando con ellos.

Por ejemplo:

    •  Un niño llora: su mamá dice " Ya lo sé, tienes hambre, aqui tienes..." mientras que se prepara para darle de comer.
    •  Un bebé produce un chillido agudo mientras que lo cambian de pañales: su padre produce en respuesta sonidos agudos similares, y se produce entre ellos una pequeña "conversación" de sonidos vocales.
    •  Un bebé gorjea y hace ruidos vocales : un adulto que está de visita se vuelve y se dirige inmediatamente al bebé y dice " Hola! ¿ Qué dices? ¿ Me estás diciendo algo? ¿ De verdad? No me lo puedo creer!...y así sucesivamente.
    •  Un bebé hace un gesto de disgusto: su padre imita su expresión y dice "¡ Cariño!
¿ Pero qué te pasa? etc.

Durante los primeros meses, como los reaccionan al comportamiento de su bebé como si realmente tuviesen intención de comunicar, el bebé comienza a intentar la comunicación intencional . Rápidamente se desarrolla un diálogo entre el padre y el niño en el cual cada uno toma claros turnos.

Este diálogo consiste en movimientos, exageradas expresiones faciales exageradas , y variados sonidos melodiosos que el los padres producen acompañando a su lenguaje oral, y frecuentemente incluye humor y bromas. Ambos, el bebé y el adulto, escuchan, miran, e (igualmente importante) toman pausas para permitir la contribución del otro, creando así una conversación en ambas direcciones.

Los niños normales pasan el primer año de sus vidas practicando sus capacidades comunicativas. De esta manera, sólo les resta la relativamente fácil tarea de encajar palabras en este ¨patrón conversacional" que ya está preparado para las palabras. Durante esta periodo, los bebés están desarrollando lo que llamamos competencia comunicativa.

Para los niños autistas, las interacciones tempranas son muy diferentes. Estos niños tienen verdaderas dificultades a la hora de usar y entender todas las formas de comunicación, incluyendo la expresión facial, el gesto, y todas las capacidades comunicativas no-verbales, así como las palabras. También tienen cierta dificultad en el desarrollo del ritmo social que permite a los bebés enlazar sus comunicaciones con las de otra persona y desarrollar un diálogo del tipo que hemos descrito anteriormente.

El desarrollo de la atención conjunta es también fundamental en este proceso. Normalmente, los bebés se interesan de una manera instintiva en lo que los demás hacen o piensan. Observan a los demás y los imitan; llaman la atención de otras personas hacia objetos señalando o llevando cosas para mostrarlas de una manera que parece decir " mira esto...¿ qué te parece?". El niño con autismo halla una gran dificultad en estas actividades y prefiere hacer las cosas por su cuenta, raramente encontrando la diversión de compartir.

Todo esto significa que tenemos que ayudar a los niños autistas a introducirse y disfrutar de la interacción con otras personas, y que esta interacción sirva como una base para ir construyendo más habilidades comunicativas. El uso del juego interactivo, tal y como se describe en este folleto, es un intento de conseguir justamente este objetivo.

 

SEGUIR Y RESPONDER

Imitación

La mayor parte de las cosas que los bebés aprenden sobre las personas lo hacen gracias a la imitación. Sin embargo, en la práctica, la mayor parte de los bebés aprenden a imitar a los adultos porque en primer lugar sus padres los imitan a ellos . El niño estornuda y su madre dice " ¡Jesús! Vaya resfriado, ¿eh?" y luego el bebé sonríe e incluso puede pretender que estornuda de nuevo como parte del diálogo. Mediante la imitación que hacen de sus bebés , los padres les ayudan a que aprecien el significado de sus conducta, y, más tarde, los bebés y niños copiarán lo que sus padres hagan.

Copiar intencionadamente los movimientos o sonidos vocales de un niño puede resultar una manera muy productiva y entretenida de conseguir atención conjunta. En las primeras fases puede intentar:

    •  Imitar algunos de los sonidos vocales del niño y hacerlos tan similares como pueda a los del niño. Trate de imitar su tono y volumen, así como el ritmo y los propios sonidos tan bien como pueda. Si parece que su hijo no se da cuenta o no presta atención, podría intentar vocalizando a través de un cartón, un tubo de plástico, o utilizando un micrófono de plástico ( o un micrófono real tipo karaoke) así como cualquier otro método que permita exagerar sus respuestas.
    •  Permitirle explorar un tambor o algún otro instrumento simple, y copiar las acciones y sonidos que hace, incluso en el caso de que no sean los convencionales que solemos esperar que se practique con un instrumento de este tipo. Puede intentar algo parecido a una "conversación" sin palabras, donde puede combinar imitarle a él y añadir algún sonido más- y comprobar si establece contacto ocular en respuesta de sorpresa.
    •  Observarlo jugar con un pañuelo o un trozo de tela vaporoso y , usando uno parecido, imitar sus posturas y movimientos, así como las formas que hace con él.
    •  Unirse a él mientras que anda, salta, y para. (Puede combinar esto con un comentario tal como describimos abajo).

Muchos niños encuentran fascinantes estos reflejos de su propia conducta y parecen de esta manera ser más conscientes de sí mismos y de sus acciones y sonidos. Algunas investigaciones también ha demostrado que el hecho de que un adulto imite al niño aumenta la cantidad de tiempo que el niño dedica mirando a la cara de esa persona. Una vez que el niño produzca un sonido o una acción deliberadamente para que sea imitada, está actuando con intencionalidad.

A pesar de que este tipo de juego de imitación normalmente se da de forma natural en bebés de muy corta edad, los niños con autismo pueden no responder de la misma manera. Puede que el jugar con un niño de 3 o 4 años o mayor a este tipo de juegos no parezca tan natural. Lo que estamos intentando hacer es volver a introducir este tipo de juego de una forma muy positiva de manera que estos niños puedan así apreciar la diversión de compartir actividades y experiencias. A su vez desarrollarán las habilidades de tomar turnos, usar el contacto ocular etc, que son fundamentales para la comunicación. Un punto de partida para promover que el niño se adentre en nuestro mundo social es que nos unamos al suyo. Algunos niños con autismo parecen necesitar que comencemos imitándolos antes de que comiencen a estar interesados en copiar nuestras acciones o sonidos.

 

Comentar

Otra manera de intentar que su niño comprenda que usted está intentando "sintonizar" con su mundo es comentar sobre lo que hace en su juego y su conducta espontánea. Estos comentarios pueden ser hablados, canturreados o cantados, y pueden variar en su complejidad desde una sencilla palabra hasta expresiones de varias palabras o frases completas. Será más fácil atrapar la atención del niño y que sea significativo si el lenguaje que utilicees simple y coincide temporalmente con sus comportamientos. Puede hacer un comentario para demostrarle que sabe lo que está mirando , o lo que quiere (“ Pablo está mirando el árbol", " Quieres el libro"), o para describir su juego, o acompañar sus actividades de la vida diaria.

    Por ejemplo:

    •  Juan frecuentemente da vueltas sobre sí mismo, y parece estar en su mundo propio. Su mamá un día lo está mirando y empieza a canturrear bajito,
    " Girando, girando
    Juan está girando
    vueltas y mas vueltas y más vueltas"

    Cuando Juan cesa de girar, su madre, añade " ¡Para!". Esto continúa por un rato, y luego Juan comienza a mirar a su madre y para, anticipándose a sus palabras. Durante unos días repiten este juego compartido, y así, al cabo de un tiempo, ambos pueden comenzar y parar el juego, usando el contacto ocular, los movimientos y los sonidos vocales.

 

    •  Cuando Sara está en el baño , le gusta salpicar pero no le gusta que la bañen. Su padre le canta mientras que intenta bañarla " Lavando los pies de Sara" y ella entonces permite que la laven. El padre canta una estrofa de "salpicar" entre medias, cuando ella salpica. En unas semanas, Sara comienza a colaborar e incluso ayuda a lavarse, disfruta eligiendo qué parte del cuerpo lavarán la siguiente , y hace sonidos para que su padre cante el comentario.

    

    •  Mateo corre de un lado al otro del pasillo, desde la cocina hasta la puerta principal, una y otra vez. Su madre se coloca al lado de la puerta de la cocina, y se agacha hasta estar a la altura de Mateo. Mientras que Mateo sigue corriendo, su madre canta suavemente
    " Corriendo hasta la puerta ....y....
    corriendo hasta mamá!" cada vez que lo hace.

    Mateo parece darse cuenta: duda un poco en la puerta principal y mira a su mamá mientras ella alarga el " y....." , creando la anticipación, antes de que Mateo corra de vuelta a ella. Unos días después , jugando el mismo juego, de repente sube corriendo las escaleras y disfruta escuchando la nueva versión "¡ Corriendo hasta las escaleras!"

 

    •  Tomás está empujando su tren por las vías, silenciosamente, mirando las ruedas. Su padre llega y se une a él en el suelo y mira. Comienza a comentar, diciendo "¡ Empujando el tren....sobre la curva, ....por encima del puente!” al tiempo que Tomás va realizando estas acciones. El comentario lo dice con un canturreo rítmico. Tomás está todavía concentrado en el tren pero de vez en cuando comienza a mirar a su padre , a veces parando el juego por unos segundos. Tras un rato, si su padre cesa de comentar, Tomás mira a su padre y hace el sonido "em". El padre contesta "¡ Empuja!¡ Si, empuja! Empujando el tren..." y así el juego continúa. Poco a poco el juego se extiende y su padre comenta cualquier pequeña variación que hace Tomás , o añade una idea él mismo de vez en cuando.

 

    •  Cuando José mira por la ventana, su madre se sitúa a su lado y comienza a cantar " Estamos mirando por la ventana, mirando por la ventana, mirando por la ventana, para ver que vemos" ( con la música de "Porque es un muchacho excelente"). Sigue la mirada de José : está mirando un coche. Sigue con la canción " Podemos ver un coche, un coche , un coche, un coche en la calle"...etc, y señala al coche. José sigue mirando al coche , pero si su madre hace una pausa en la canción, la mira para que continúe cantando. Durante las próximas semanas, este juego se desarrolla en el autobús así como en casa y en la guardería. José comienza a mirar distintas cosas e incluso comienza a señalar a objetos para que su madre cante acerca de ellos. ( Mirar el folleto Enseñando a señalar por la importancia de este gesto).

 

Uno de los principales beneficios de estos tipos de comentarios es que a través de ellos el niño escucha lenguaje que es relevante y tiene un significado para él en ese momento. También le enseña que usted es consciente de lo que el está haciendo y que está interesado en lo que él hace. Puede ser que, así como comienza a producir acciones y sonidos con la intención de que usted los copie, puede comenzar a hacerlos para que los comentes Esta intencionalidad es fundamental para el desarrollo de la comunicación.

 

CREAR UN MARCO PARA LA COMUNICACIÓN

A veces, seguir y responder a su niño como hemos descrito conduce a una situación donde puede conseguir una " conversación" bidireccional, aunque sea a un nivel muy básico. Otras veces, ayuda si introduce pequeñas rutinas de juego repetitivas y canciones familiares, que actúan como "marco" para la conversación.

Rutinas de juego

Rutinas de juego son aquellos pequeños juegos repetitivos que los adultos tienden a jugar de manera instintiva con los bebés y niños de corta edad. Algunos son muy conocidos, y se transmiten de generación en generación, como el " cu- cuu". Otros se inventan jugando con sus niños y repitiendo lo que observe que disfruta. Estos juegos a menudo incluyen contacto físico o juegos activos y dinámicos , y es común que muchos padres de niños con autismo encuentren que se sienten más cercanos a su niño con estos tipos de intercambio, más que durante intercambios más tranquilos.

Las rutinas de juego de este tipo pueden ser no-verbales, pero normalmente contienen un lenguaje simple y repetitivo e incluyen un elemento de anticipación antes del clímax.

Algunos ejemplos son:

    ¡¡Vengo a columpiarte !!
    ¡¡123......cosquillas! ( en este momento le hace cosquillas a su hijo)
    ¡¡y.....salta!!
    ¡y ahora vamos....
    a dar vueltas! ( podemos ir haciendo lo que tu niño disfrute hacer)

    

Un cuidadoso uso del tiempo, de las pausas y del ritmo en estos juegos es fundamental ya que marca la diferencia entre pasar un buen rato, y dar oportunidades para desarrollar capacidades comunicativas en una situación divertida de juego compartido.

Por ejemplo, una vez que haya encontrado una rutina de juego que ambos disfrutéis, puede intentar:

    •  Ir creando la expectación ( subiendo y bajando el volumen de la voz) y de repente haciendo una pausa silenciosa antes del punto clave, para que el niño aprenda a anticipar el desenlace.
    •  Respondiendo a pequeñas señales de anticipación del niño ( por ejemplo, una mirada o un sonido) continuando inmediatamente al observar la señal.
    •  Repitiendo el juego y haciendo pausas para ayudar a su niño a indicar intencionalidad y que quiere que el juego continúe.

Más tarde, puede extender y variar sus rutinas de juego, para ayudarle a ser más flexible y a hacer elecciones que tengan significado para él. Por ejemplo, puede elegir entre que le columpien, o le hagan cosquillas , mediante un gesto, movimiento, sonido o palabra.

Canciones de acción

Cantar con su niño puede ser una manera tranquila y divertida de atrapar su atención y compartir una actividad. No necesita una excelente voz para cantar para realizar las actividades que aquí sugerimos- sólo necesita entusiasmo y deseos de "sintonizar" con las elecciones y respuestas de su niño.

" Canciones fijas"

Las canciones de acción fijas, tales como " Row your boat" , normalmente tienen mucho éxito entre los niños pequeños. Los niños disfrutan las repeticiones, y pueden comenzar a observar, anticipar o unirse en algunas de las acciones. Una vez que haya encontrado una canción que le guste a su niño, puede variar la velocidad y el ritmo para dar oportunidades al niño de que participe , al igual que lo hacía en las rutinas de juego.

Por ejemplo, usted puede:

    •  A veces intentar enfatizar una pausa antes de realizar la acción preferida del niño en una canción. El niño quizás al cabo de un tiempo introduzca una acción, sonido o palabra a propósito cuando usted haga la pausa. Sin embargo, para empezar , probablemente tenga que actuar como si lo hiciera ( Si usa mucho una cierta canción, lo mejor es no realizar la pausa siempre en el mismo punto, así evitamos que la pausa se convierta en parte de la rutina y así pierda su impacto).
    •  Cantar una canción familiar para el niño de una forma lenta, de manera que el niño pueda adelantarse a usted en ciertos momentos y pueda dirigirle a través del contacto visual , los movimientos del cuerpo, los sonidos o las palabras.
    •  Marcar fuertes contrastes de ritmo y volumen al repetir una canción , de manera que el niño pueda expresar su preferencia y hacer una elección .

Canciones "flexibles"

Canciones de acción flexibles tales como " This is the way we stamp our feet" etc, son muy útiles a la hora de crear un marco para la comunicación. En este tipo de canciones, las palabras no son exactamente las mismas cada vez que las cante, y pueden adeptarse al estado de ánimo y a las preferencias de su niño en cada momento.

En las primeras etapas puede usar estas canciones para:

    •  Cantar acerca de lo que esté haciendo con su niño, por ejemplo, " Así planchamos, así, así ", etc.
    •  Cantar acerca de los que su niño está haciendo por su cuenta - por ejemplo, " Así es como damos vueltas" y así sucesivamente. Este apartado se une con la sección anterior acerca de " Seguir y responder ". Al igual que cuando hace un comentario, crear una pequeña canción sobre lo que está haciendo su niño puede ayudarle a atrapar su atención y permitirle realizar más acciones intencionales.
    •  Ofrecer ideas para que su niño mire o copie, por ejemplo " Así es como nos lavamos las manos" etc. Pero no se olvide de que normalmente es más fácil que su niño realice acciones que usted pueda copiar que imite las que usted realice. De esta manera, una vez que haya copiado algunas de las acciones de su niño, él quizás comience a mostrar interés en intentar copiar algunas suyas. Esto puede convertirse en un buen juego interactivo.
    •  Dar al niño una oportunidad clara para elegir una acción : tan pronto como haya encontrado dos acciones que el niño disfrute, puede usted hacer la pausa en " Así es como........."

 

Algunas otras canciones que podemos usarlas flexiblemente son:

    Drunken Sailor Ejemplo: " Qué hacemos con Thomas Mason.....? Le daremos golpecitos, golpecitos , en las rodillas...etc
    Skip to my Lou Ejemplo " Aplaude, aplaude, aplaude con tus manos.......etc"

 

DESARROLLAR EL " DAR Y TOMAR"

Algunas de las ideas que hemos sugerido pueden comenzar a funcionar bien para su niño y para usted así puede ir construyendo una serie de juegos y canciones que ambos disfrutéis. Y ahora, ¿hacia dónde nos dirigimos?

En las primeras etapas, podrá encontrar a veces que las interacciones con el niño son más bien unidireccionales. Algunos niños se interesan sólo si todo se desarrolla tal como ellos quieren y si sigues sus pautas. Al principio puede aceptar este tipo de interacciones, pero poco a poco puedes ir moviéndote hacia un mayor " equilibrio" tal como el de una buena conversación. El objetivo final es que ambos puedan compartir el control de una manera flexible. La consecución de este objetivo puede requerir para algunos niños mucho tiempo de trabajo.

Con este objetivo en mente, puede intentar algunas de las siguientes propuestas:

    •  Busque momentos en el juego compartido en los que pueda bromear ligeramente uno con el otro- quizás haciendo algo inesperado en un juego conocido, o haciendo una pausa más larga de lo habitual, creando así un elemento de sorpresa.

    •  Si el niño disfruta tomando la iniciativa en un juego de imitación, puede intentar introducir algunos sonidos o movimientos que sepa que le gustan, y observar si le sigue. Si le sigue, puede poco a poco introducir pequeñas variaciones y distintas acciones o sonidos. En cualquier punto del juego, usted puede volver a imitarlo a él, intentando no perder demasiado el ritmo de turnos.

    •  Si está muy apegado a rutinas y canciones establecidas, puede intentar extenderlas para ser más flexible, tomar turnos para elegir una, o intentar crear un " espacio" entre ellas para dar la oportunidad a que ocurra algo más espontáneo.

    •  Incluso una vez que esté participando con el niño en canciones de acción flexibles, puede ir ajustando el equilibrio de quién dirige y quién sigue de verso a verso.

 

FINALMENTE:

El juego interactivo puede ser una manera útil y divertida de ayudar a su niño a practicar algunas de las habilidades fundamentales para el desarrollo de la comunicación. Las ideas en este folleto pretenden introducir al niño de una manera activa en la interacción , de forma que se acostumbre a compartir intereses, a mirar, a escuchar y a tomar turnos. A este tipo de juego se le llama juego recíproco, y proporciona al niño un sabor de la empatía social que resulta tan complicada de adquirir en niños con autismo. Pero una vez que el niño esté haciendo estas cosas, será capaz de aprender mucho más de las personas que le rodean.

Quizás ya haya desarrollado algunos juegos y canciones para ir construyendo los pilares tal como hemos sugerido aquí, o quizás encuentre que tiene que empezar de la nada. Aunque su niño parezca no reaccionar al principio, persista en sus intentos de jugar con él. Esto no significa que le tenga que forzar a hacer cosas que no le gustan, pero a veces hacen falta unas cuantas repeticiones para que el niño se de cuenta de que lo que le está ofreciendo puede ser algo divertido.

También necesitará adaptar estas actividades y su planteamiento para adaptarse a su propia personalidad y la de su niño, y más concretamente, a sus preferencias y necesidades. Por ejemplo, algunas personas encuentran que sus niños se "implican" mejor cuando el adulto se dirige a ellos en el juego con un estilo dramático, expresiones faciales exageradas y un tono de voz agudo. A otros niños en cambio, esto les resulta totalmente agobiante e indeseable y en estos casos necesitamos bajar el tono de voz, suavizar las expresiones faciales y las acciones con el objetivo de conseguir que el niño mire y participe en las canciones y juegos.

Sobre todo, este enfoque trata de desarrollar la comunicación a través de la diversión común . El juego deja de ser juego si es forzado. Esperamos que haya tomado nota de algunas de estas ideas para ayudar a su niño a desarrollar el marco de interacción básico para la conversación. Una vez que esté usando estas capacidades básicas, el niño es mucho más capaz de desarrollar sonidos, gestos o palabras, y de usarlos de una manera intencional , y en un contexto significativo.

Canción popular anglosajona que se asimilaría a una canción en español como " Al trote" o " Cinco lobitos"

Canción popular anglosajona que se asimila a una canción española como " Así planchaba..."



No hay comentarios:

Publicar un comentario